Extraño
sentimiento, extraña dama,
no
sé si eran tus besos de paloma
o
la caricia de tu piel de rosa,
no
sé si por hermosa yo te amaba.
Y
mientras más huía de este extraño
sentimiento
que tiernamente cruel
de
tu ardiente perfume de mujer
manaba,
más mi mal era mi amo.
Y
ahora lejos de ti me pregunto,
manchado
de lágrimas y de besos,
humillado
por la flor del deseo,
si
aquella sublime luz que atribuyo
a
un dios sublime creador del mundo
sólo
es traición de amor en un espejo…
INTENSO
ResponderBorrarMARAVILLOSO
TU
TEXTO
Gracias por tus palabras de contento.
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